Qué ver, qué hacer
à Berna

Guía de viaje Berna

Berna es la capital de Suiza y es famosa por su bien conservado casco antiguo medieval, su reloj astronómico y el Parlamento Federal.

Fundada en el siglo XII, Berna posee una rica historia medieval y está declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

El tren es la forma más cómoda de llegar a Berna, con conexiones frecuentes desde Zúrich, Ginebra y otras ciudades importantes.

Alojamiento

Las opciones de alojamiento en Berna van desde hoteles de lujo hasta albergues juveniles.

Gastronomía

El queso emmental y el chocolate suizo son especialidades locales.

¿Qué hay que ver? ¿Qué hacer?

No se pierda el Zytglogge, el Parlamento y el Museo Paul Klee.

El casco antiguo es una visita obligada, al igual que el barrio de Matte.

Senderismo y ciclismo por el río Aar, y visita al Parque de los Osos.

El Museo de la Comunicación es ideal para familias.

El Zibelemärit (Mercado de la Cebolla) es un acontecimiento que no debe perderse en noviembre.

Actividades

Compras

El casco antiguo es ideal para ir de compras, con una gran variedad de boutiques locales.

Vida nocturna

El casco antiguo ofrece bares y discotecas para todos los gustos.

¿Lo sabías?

El Parque de los Osos es una atracción única donde se pueden ver osos vivos.
El casco antiguo de Berna está rodeado casi en su totalidad por el río Aare.
El Zytglogge es un reloj astronómico construido en el siglo XIII.
Berna es una ciudad muy verde con muchos espacios abiertos.
El Museo Einstein está dedicado al ilustre residente de la ciudad, Albert Einstein.

Trucos y consejos
Un billete de tranvía es válido durante una hora, incluidas las conexiones.
Los museos suelen ofrecer entrada gratuita los sábados.
En verano, nadar en el río Aar es una actividad muy popular entre los lugareños.

Utilice la Bern Card para obtener descuentos en transporte público y atracciones.

Hola, soy Albert, un viajero de 59 años apasionado por explorar apasionantes ciudades europeas. Berna, la capital suiza, siempre me ha fascinado por su tranquilo encanto y su rico patrimonio cultural. Desde pasear por su casco antiguo medieval hasta admirar las montañas nevadas desde el Rosengarten, cada visita me trae recuerdos inolvidables.

Albert M.

DiamsTrotter Berna